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El 1 de diciembre, un Tribunal de apelación argelino dio malas noticias a un creyente converso, confirmando la sentencia que le condenaba por haber recibido una ayuda sin ser musulmán.
En noviembre, el Departamento de Estado de Estados Unidos anunció que, por primera vez, incluiría a Argelia en su lista de vigilancia especial de países que «cometen o toleran graves violaciones de la libertad religiosa».
La decisión estaba en consonancia con una recomendación de la Comisión de Libertad Religiosa Internacional de Estados Unidos, un organismo asesor, que afirmó que las condiciones de libertad religiosa en Argelia se habían deteriorado en los últimos años.
«Las autoridades estatales han socavado las protecciones constitucionales de la libertad de religión y creencia al perseguir a los argelinos por blasfemia, proselitismo y otros cargos relacionados con su fe», según un informe de actualización de país de la comisión.
Uno de los incidentes más recientes es el de un converso del islam de 35 años, Foudhil Bahloul, que está luchando contra una sentencia judicial que le condenó a seis meses de prisión y a una multa de 100.000 DZD (unos 700 euros), por una serie de cargos.
Bahloul fue condenado en julio por un tribunal de Ain Defla por una «donación no autorizada» en virtud de una ley que regula el ejercicio de las religiones no musulmanas. Esto se refería a la ayuda ocasional que recibía mientras estaba desempleado. Desde su conversión, Bahloul ha sido condenado al ostracismo por su familia paterna y su negocio se ha tambaleado, dejándolo sin una fuente de ingresos.
Durante la vista de su caso en junio, se enteró de que se habían presentado más cargos contra él, relacionados con la impresión y distribución de material cristiano a los musulmanes, y con la evangelización.
El 1 de diciembre, un tribunal de apelación confirmó la sentencia; una decisión que Bahloul, al parecer, recurrirá ante un tribunal superior.
La conversión de Bahloul ha creado otros problemas legales. Tras su conversión, su esposa se divorció de él, conservando la custodia de sus hijos. Al viajar al extranjero durante los cierres fronterizos relacionados con Covid, no pudo entrar en Argelia para pagar la pensión alimenticia. Un juez no se dejó convencer y condenó a Bahloul a un año de prisión.
Puertas Abiertas pide al gobierno que reconozca y salvaguarde los derechos de las minorías religiosas, de acuerdo con los pactos internacionales que el país ha suscrito, que reabra todas las iglesias cerradas por la fuerza y que anule las sentencias de los cristianos condenados por sus actividades religiosas.
En septiembre, una ONG pidió a la relatora de la ONU para la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y de expresión, Irene Khan, que interviniera en favor de un cristiano argelino converso condenado a cinco años de prisión por blasfemia.
Señor, te doy gracias por la conversión de Foudhil, y te pido que continúes ayudándole en los pasos que él debe tomar tras la sentencia que le condena; que le ayudes a saber cómo debe proceder ante esto. También te pido por la situación de las iglesias en el país, muchas de las cuales continúan cerradas, para que se restablezca la normalidad y puedan abrir sus puertas. Te ruego que intervengas para que el gobierno argelino respete la libertad religiosa de sus ciudadanos. Amén.
